En todo el mundo, las emisiones de CO2 se han convertido en una preocupación, ya que tienen un fuerte impacto sobre el cambio climático, lo que ha generado consecuencias ambientales y sociales.
Es fundamental tomar conciencia sobre el tema, y saber cuáles son las medidas que se pueden implementar a nivel gubernamental para reducir las emisiones de dióxido de carbono y preservar el medio ambiente.
¿Qué son las emisiones de CO2?
Se conoce como emisiones de CO2 a la liberación de dióxido de carbono a la atmósfera Este gas proviene de diferentes fuentes, pero sobre todo derivado de la actividad humana como la quema de combustibles fósiles, emisiones procedentes de diferentes procesos industriales, explotaciones ganaderas intensivas, etc.
Según un informe del Banco Mundial, en todo el mundo las emisiones de CO2 en 2020 llegaron a ser de 4,3 toneladas métricas per cápita. Esta es una cifra alarmante, especialmente, porque el dióxido de carbono es uno de los principales gases de efecto invernadero e impacta significativamente en el calentamiento global.
Principales fuentes de emisión de dióxido de carbono
Como ya mencionamos, la principal fuente de emisión de dióxido de carbono es la quema de combustibles fósiles, pero la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos profundiza más en el tema y señala que se debe a:
- Generación de energía: en países como los Estados Unidos, la quema de carbón, petróleo y gas natural para generar electricidad fue la segunda fuente más importante de emisiones de dióxido de carbono en el año 2017.
- Transporte: el uso de gasolina y diesel para transportar tanto personas como mercancías fue la fuente más importante de emisiones para el mismo año.
- Procesos industriales: la producción industrial de productos como el cemento, el acero y el hierro también influye sobre las emisiones de CO2.
- Deforestación: la deforestación de los bosques por actividades agrícolas supone aproximadamente un 20% de las emisiones de CO2.
Estas actividades liberan CO2 a la atmósfera, contribuyendo al aumento de gases de efecto invernadero.
En países como China las fuentes de emisión de CO2 se distribuyen de manera similar. Además, en este país, durante los últimos años han incrementado significativamente las emisiones.
Impacto ambiental y consecuencias globales de las emisiones de CO2
Las emisiones de CO2 generan diferentes consecuencias en todo el mundo, afectando los ecosistemas y el clima, principalmente. Según el Registro Estatal de Emisiones y Fuentes Contaminantes, el dióxido de carbono es una de las sustancias que mayor impacto tiene sobre el calentamiento global.
El CO2 actúa como una “manta” alrededor de la Tierra, atrapando el calor y aumentando la temperatura global. Este fenómeno, conocido como el efecto invernadero, está causando cambios climáticos drásticos, como el aumento de la temperatura, el derretimiento de los casquetes polares y el aumento del nivel del mar. Un incremento en la frecuencia con la que se presentan eventos climáticos extremos como las sequías, las olas de calor y los huracanes, entre otros más.
El reparto de emisiones de CO2 por sectores en España
En España, al igual que sucede con otros países como los que señalamos antes, las emisiones de CO2 se distribuyen en diferentes sectores. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), para el año 2021, esta fue la distribución de las emisiones de CO2:
- Industria manufacturera: 25,4 %.
- Hogares: 23 %.
- Agricultura, ganadería, silvicultura y pesca: 17,3 %.
- Suministro de energía eléctrica, gas, vapor, aire acondicionado y agua: 15,5 %.
- Servicios de transporte y almacenamiento: 12,6 %.
- Resto de actividades: 6,2 %.
Estos datos de reparto de las emisiones de CO2 por sectores en España, revelan que la industria manufacturera es el sector con la mayor proporción de emisiones. De igual manera, llama la atención el impacto de los hogares como consumidores finales, ya que tiene un porcentaje de emisiones importante.
Datos sobre las emisiones de CO2, valores anteriores y tendencias en España y demás países
En los últimos años se han implementado políticas que buscan regular la cantidad de emisiones de CO2, tanto en lo que corresponde a España como al resto del mundo.
Durante el año 2022, en España, la emisión de CO2 alcanzó los 304.438 millones de toneladas, lo que supuso un aumento del 3,1 % respecto al año anterior. Sin embargo, hay que tener presente que en relación a años anteriores, se refleja una tendencia decreciente. Puedes consultar en este enlace la evolución de las emisiones de CO2 en España.
De hecho, en comparación con el año 2008, las emisiones de CO2 de España son un 26,9 % más bajas, según el INE. Esto es algo que contrasta con la tendencia global, ya que las emisiones de CO2 han aumentado en todo el mundo de manera constante.
Dentro de los países con más emisiones de dióxido de carbono destacan China con un 32,9 %, Estados Unidos con un 12,6 % y la India con 7 %. Sin embargo, analizando las emisiones de CO2 per cápita, 6 de los 8 países que lideran la tabla se encuentran en la zona de Oriente Medio.
Acciones y políticas de los gobiernos sobre las emisiones de dióxido de carbono
Para reducir las emisiones de dióxido de carbono, los gobiernos han implementado diferentes políticas durante los últimos años. Algunas de ellas tienen que ver con la promoción de fuentes de energía renovables, brindando subsidios e incentivos fiscales para quienes invierten en energías como la eólica, solar y geotérmica, entre otras.
A nivel global también se han firmado acuerdos internacionales con los que se busca regular las emisiones de CO2 y mitigar el impacto que los gases de efecto invernadero tienen sobre el planeta. Un ejemplo de ello son las Cumbre del Clima (COPs), en las que se han firmado el Protocolo de Kyoto y el Acuerdo de París.
Sin embargo, no todos los gobiernos cumplen con esto, y siguen emitiendo grandes cantidades de dióxido de carbono al ambiente.
Los derechos de emisión de CO2
Los derechos de emisión de CO2 son un mecanismo de regulación con el que se busca reducir las emisiones de dióxido de carbono en el ambiente. Estos derechos representan el límite de emisiones que puede tener una empresa de forma legal.
Generalmente, son otorgados por los gobiernos, pero también se pueden adquirir derechos adicionales en el mercado de CO2, ya que hay empresas que no los utilizan por completo y pueden vender sus excedentes. Un ejemplo de este mecanismo de regulación es el sistema EU ETS, implementado por la Unión Europea desde el año 2005.
Este sistema forma parte de su política climática desde entonces, y con él se ha logrado reducir considerablemente las emisiones de dióxido de carbono en la región. Para poder cumplir los objetivos de la Agenda 2030 en la Unión Europea, deberían reducirse las emisiones un 43% en comparación con los niveles de 2005.
Tecnologías y soluciones sostenibles de cara al futuro
Algunas de las soluciones que se pueden implementar para reducir las emisiones de CO2 es desmantelar las plantas de carbón. Algo con lo que, según las Naciones Unidas, se han comprometido países como Chile y Alemania.
En Costa Rica, por otra parte, el 99 % de la energía eléctrica que se produce proviene de fuentes renovables.
Asimismo, en algunos países se ha estado trabajando para mejorar la eficiencia de los transportes públicos, con el propósito de que los vehículos particulares se utilicen cada vez menos.
En cuanto al aspecto tecnológico, los sistemas de captura y almacenamiento de CO2 se proyectan como una solución para ciertas industrias a largo plazo. Actualmente las instalaciones de captura de carbono tienen una capacidad de 40 millones de toneladas de CO2 al año, frente a las 34.000 millones de toneladas anuales que se liberan en todo el planeta.
Conclusiones
Las emisiones de CO2 son uno de los factores que más influyen sobre el cambio climático, y cada vez resulta más importante regularlas y reducirlas. En todo el mundo se han tomado medidas con el propósito de lograrlo, pero aún queda mucho camino por recorrer.
La mayoría de los compromisos que se han firmado a nivel internacional para controlar las emisiones de CO2 son de medio y largo plazo. Además, países como China y Estados Unidos no sólo no han reducido la cantidad de emisiones que generan, sino que se mantienen como los principales responsables de la emisión de dióxido de carbono en el planeta.
